El jurado del certamen, organizado por la Comarca de Los Monegros, decidió ayer otorgar el primer premio del VII Concurso de Relatos Cortos “Tierra de Monegros”, dotado con 1.800 euros, a Francisco Javier Pérez Hernández, de Zamora, por su obra “Las almas de los tontos”.

El segundo premio, dotado con 900 euros, ha sido para el cuento “Longo” del argentino de Buenos Aires, Atilio Alberto Verón. El jurado ha decidido otorgar asimismo tres accésits para las obras “El mar de las lentejas”, de Patrocinio Gil, “Milagro”, de Manuel Francisco Rodríguez García, y “Los signos de los tiempos”, de María Luisa Frisa Gracia.

Los ganadores de los accésits consiguen 120 euros en libros cada uno. Además, el premio al relato de temática monegrina, dotado con 600 euros, fue para “El gallo de Marcén”, escrito por Amadeo López Cobas, de A Coruña. Los premiados disfrutarán también de dos días de viaje turístico-cultural por la comarca de Los Monegros.

El jurado, que estaba compuesto por el consejero de cultura de la Comarca de Los Monegros, Jesús Brau, el escritor Oscar Sipán, el profesor de literatura, José Angel Sánchez, el crítico literario, Miguel Angel Ordovás y la escritora y presidenta de la asociación “Aveletra”, agotó las tres horas de deliberación antes de emitir su fallo entre las más de cien obras presentadas al concurso.

El relato ganador es un cuento de fantasmas, que narra lo que ocurre en una reunión de la sociedad escocesa para la investigación de fenómenos extraños. “Es un clásico, un relato muy interesante con un sorprendente final”, explica Sipán. En el segundo clasificado, el jurado ha valorado su lenguaje de gran riqueza. “Se trata de un cuento redondo, perfecto, cuenta la historia de unos amigos del colegio que se reúnen años después para ver el personaje de Langueira que les marcó en su infancia”.

Por lo que respecta al primer clasificado en la modalidad de relatos monegrinos, la obra ganadora cuenta la historia de un gallo de veleta que está en una casa de Marcén y con ese pretexto el autor narra la historia del pueblo y de la casa.