La Escuela Comarcal de Teatro celebró el pasado domingo la clausura del curso 2010-2011 en Valfonda de Santa Ana, organizado por el Instituto de Estudios e Investigación de la Comarca de Los Monegros y promovido por la Asociación de Consumidores y Usuarios de la localidad. Seis alumnas adultas siguen este curso que comenzó en octubre. Han sido varias las actuaciones que el grupo ha representado, por lo que las alumnas han podido trabajar diferentes estilos. De este modo, en Navidad representaron los monólogos del humor y en Santa Águeda, Sainetes.

En esta ocasión, un centenar de personas siguieron entusiasmadas las evoluciones de estas seis mujeres en el escenario que representaron dos entremeses: “Las aceitunas”, de Lope de Rueda y “Ganas de reñir”, de los Hermanos Álvarez Quintero. En el primer caso, actuaron en el papel de Toribio, Silvia Bernués, como Águeda, Cristina González, en el papel de Mecigüela, Mari Clavería y como Aloja, Josefina Macías. En la segunda actuación, tomaron el relevo Manoli Ropero, como Martirio, y en el papel de Julián, Inmaculada Pérez.

Actuación en el Cine Teatro “El Molino” de Sariñena el próximo viernes

Por otro lado, los alumnos de la Escuela Comarcal de Teatro en Sariñena actuarán en la representación fin de curso el próximo viernes, 10 de junio, a las 19.30 horas en el Cine-Teatro El Molino, con la puesta en escena de las obras “El traje del emperador” y “El hormiguero”. En total son 26 alumnos los que están inscritos en la capital monegrina, divididos en dos grupos según la edad, que siguen sus clases desde octubre hasta mayo.

La Escuela Comarcal de Teatro también tiene alumnos en Lalueza. En esta localidad monegrina, la actuación de clausura del presente curso tendrá lugar el domingo, 12 de junio a las 18 horas en el Centro Sociocultural de Lalueza, con la obra “El pepino que quería ser elefante”. La profesora de teatro de todos los grupos es Eva Martínez, quien valora de forma muy positiva la evolución de los alumnos a lo largo del curso. “Los tres últimos meses ensayamos la obra fin de curso, pero además hacemos bailes, juegos, improvisaciones, ... Es muy gratificante trabajar con niños y adolescentes, algunos de ellos ya llevan siete años como alumnos. Siempre intentamos que las obras tengan una reflexión final, porque además de interpretar y memorizar es importante que aprendan valores, para conseguir que sean buenos actores y mejores personas”.